El dúo creativo vuelve tras The Handmaiden (ya habían escrito juntos Sympathy for Lady Vengeance, Soy un Cyborg y Thirst) con el más difícil todavía: una historia que, por primera vez en muchos años, renuncia a las escenas violentas/sexuales, venganzas y calificación para mayores de 18 años, pero que resulta igual de impactante.
Decision to Leave supone un gran salto visual y narrativo en la carrera de un director que poco tenía que demostrar a estas alturas. Sin embargo, el cine de Corea del Sur (y el asiático en general) se caracteriza por su innovación, y eso es lo que nos ofrece esta película.