La historia gira a Kieren Walker, un joven afectado por el síndrome del parcialmente muerto (el término clínico para zombi) que tras recibir tratamiento en uno de los centros de rehabilitación es devuelto a vivir con su familia a su pueblo natal. La guerra entra zombis y humanos es reciente y los conflictos no tardarán en producirse.
La mayoría de pelis y series de zombis se centran en la supervivencia de los humanos. Los cambios de una historia a otra es si es provocado por un virus o son los muertos quienes se levantan de las tumbas, si los zombis/infectados son atletas sin fondo o de caminar lento. Algunas se centran en la supervivencia, luchando contra zombis y humanos por igual y otras, en buscar una cura. Tienen sus escenas de ataques zombis con su dosis de casquería y sangre y el trabajo está hecho.
La historia no es importante, salvo para situar el contexto del apocalipsis de turno y los personajes van del líder al cobarde pasando por el mártir que se sacrifica para que el grupo pueda escapar.
El punto fuerte de In The Flesh es, precisamente, su historia y los variados personajes y sus puntos de vista de la situación. Hay de todo: zombis que quieren coexistir con los humanos, humanos que quieren coexistir con los zombis (raro es el que no tiene un pariente o amigo zombi), humanos que quieren exterminarlos (lo dice la biblia) y zombis que dicen ser el siguiente paso en la evolución. En resumen: hay de tó.
En esta serie, los zombis salen de sus tumbas una medianoche de 2009 (hecho conocido como The Rising) y comenzó la lucha por la supervivencia durante 4 años hasta que un científico inventó una "cura" para devolver la conciencia a las personas en este estado. No vuelven a ser completamente humanos, vuelve su personalidad, sus recuerdos, recuperan el habla, pero su piel sigue siendo pálida, sus ojos son de un color poco natural, no siente dolor y no envejecen. Tranquilos, para facilitar la inserción los afectados tienen un kit de maquillaje y lentillas. Eso sí, el efecto no es duradero, los afectados han de inyectarse el suero todos los días para no volver a su estado "rabioso" y comenzar el festín.
In The Flesh, no es una serie de zombis afectados por el síndrome del parcialmente muerto al uso. No esperéis ver desmembramientos ni vísceras ni tiroteos en cada capítulo (los hay, pero pocos). La guerra ya ha pasado y la serie se centra en la convivencia con una nueva especie, cosa que a los humanos se nos da de lujo, por cierto.
Más aún, todo el tema zombi es una excusa para sacar a la luz las discriminaciones que varios colectivos como los enfermos de SIDA, negros, judíos, homosexuales, animales, etc, han sufrido en nuestra sociedad. Todo concentrado en la figura de estos afectados. Por supuesto, hay una historia con varios misterios por resolver.
Muchos temas se tocan en esta serie y de una forma muy natural y sin grandes aspavientos: la política (los zombis no tienen derechos, son una mezcla entre ilegales y parados), religión (obviamente, Dios dice que hay que matar zombis) y otros temas que omitiré para evitar spoilers.
La trama resulta "creíble" y las medidas tomadas nos son cercanas. Los afectados han de participar en programas de inserción y realizar trabajos comunitarios obligatorios sin remuneración como si se tratasen de parados españoles.
La serie no es de humor, pero determinados razonamientos de algunos personajes son para echarse unas risas.
La serie consta (por ahora) de dos temporadas. La primera son 3 episodios y la segunda de 6 episodios. Una buena opción si te gusta el género como si no, puede que guste más a éstos. Si eres amante de la casquería y el gore, esta no es tu serie. Aquí no se viene a aplaudir cada vez que se mata a un afectado.
Para hacerse una idea, sigue el tono de la película hispano-canadiense Retornados, haciendo hincapié en la situación vívida desde un punto de vista de un afectado y sus dificultades. Hay muchas diferencias entre In The Flesh y Retornados, pero el enfoque básico en similar.
Una serie muy amena y con un buen ritmo general. Si eres capaz de haber visto todas la temporadas de The Walking Dead hasta ahora sin aburrirte (toda una hazaña, teniendo en cuenta que la mayoría de los capítulos son lentos y no pasa nada), no hay excusa para dedicarle unas horas a esta serie de la BBC.
Si no te gusta, te queda TWD para aburrir (literalmente) hasta llegar a su 12 temporada final. Por otro lado, si te enganchas te queda esperar un tiempo para ver la tercera temporada.
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