Quantic Dream fue fundada en 1997 con sede en París, Francia.
David Cage es el responsable de los guiones de los títulos y del enfoque jugable, al igual que uno de los fundadores y el objetivo principal de las críticas de jugadores y medios.
Actualmente, desarrollan títulos exclusivos para Sony que no se muestran descontentos con los proyectos de Cage.
La característica que más mosquea a muchos entendidos (profesionales o no) del sector es, precisamente, lo que los hace destacar: su forma de entender y plantear un videojuego.
Si la mayoría de los juegos consisten en enfrentarnos a todo lo que nos encontremos y comenzar a pegar tiros a la mínima excusa, en los títulos de Quantic eso no pasa. Si en un juego de Cage vas a pegar un tiro va a ser una decisión difícil, con toda seguridad.
La ambientación, los personajes y, sobre todo, la historia son los elementos más importantes para el estudio. En estas aventuras, las conversaciones son un punto clave para conocer al personaje y a quienes le rodean y la toma de decisiones constante puede marcar una diferencia si necesitamos obtener una información como ocurría en Heavy Rain.
También, hay lugar para la tensión y la acción. Combates cuerpo a cuerpo o tiroteos, con más o menos Quick Time Events, donde la destreza del jugador determina si acabas siendo apalizado o no. Esta tensión se acentuaba en Heavy Rain donde morir no impedía continuar la historia (eso sí, con un personaje menos).
La crítica más escuchada es que David Cage es un director de cine frustrado. Sus títulos son lo más parecido a una película interactiva que se puede encontrar en el mercado, cosa que a algunos les parece malo.
Por sus proyectos se puede deducir que David Cage y su equipo de Quantic intentan llevar este sector al gran público. Si el cine y los libros lo consiguen, ¿por qué no los videojuegos?
Los juegos son una nueva forma de contar historias y ofrecen un sistema único para que el público se meta en el papel del personaje y tome decisiones marcando el devenir del argumento (dentro de las posibilidades, claro). Un aspecto que el cine y las novelas no pueden alcanzar por mucho 3D que pongas.
Quantic Dream es un estudio revolucionario (con o sin éxito) en el mundo de los videojuegos. Ha llevado a las aventuras gráficas a un nuevo nivel mucho más adulto sin olvidarse del argumento.
Tan mal no lo han hecho cuando estudios como TellTale Games y sus juegos The Walking Dead, The Wolf Among Us y sus siguientes títulos basados en Borderlands y Juego de Tronos, cuentan con un sistema de juego similar al usado por Quantic Dream en sus títulos.
En un sector con un público, en su mayoría, jóvenes y hombres que buscan un título de acción y rápido, es difícil conseguir un elevado número de seguidores y ventas (aunque no les va mal).
Difícil, pero no imposible y el auge de este tipo de títulos lo demuestra.
La narrativa y la jugabilidad no tienen que estar enfrentados.
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